La norma ISO 14067 proporciona una metodología estandarizada para calcular el PCP, lo que garantiza la coherencia y comparabilidad entre los productos y las organizaciones. La evaluación de las emisiones de GEI de un producto debe incluir las técnicas de análisis del ciclo de vida de las normas ISO 14040 e ISO 14044.
Lo más importante es que el uso de la norma ISO 14067 para calcular el CFP puede garantizar que el análisis del ciclo de vida del producto esté completo y que se tenga en cuenta toda la información relevante del producto.
Hay dos enfoques complementarios. Un enfoque iterativo proporciona coherencia en los resultados y los perfecciona hasta obtener los mejores resultados. Un enfoque científico incluye, siempre que sea posible, información y datos físicos, químicos, biológicos y de otro tipo para el análisis del ciclo de vida del producto.
Las organizaciones deben demostrar que los resultados son coherentes, precisos y, si el resultado del análisis se comunica externamente, transparentes, de modo que los terceros interesados puedan confiar en los resultados.