La Modelación Numérica y su potencial transformador para la industria acuícola

Durante los últimos años hemos conocido distintos puntos de vista y además múltiples investigaciones que hablan de los desafíos que enfrenta la acuicultura en todo el mundo, incluyendo en nuestro país. Chile es el principal productor acuícola de América, es la segunda mayor producción mundial de salmónidos, y es el cuarto mayor exportador de productos acuáticos, abasteciendo de salmón del Atlántico a Brasil y Estados Unidos, y de coho de piscifactoría a Japón. Al tener este sector la importante misión de preservar la seguridad alimentaria en el contexto del cambio climático -al mismo tiempo que mantienen la biodiversidad y bioseguridad- es importante revisar maneras en que la actividad sea sostenible y responsable, incorporando las nuevas tecnologías y buscando nuevos lugares para su desarrollo.

Entonces ¿cómo la modelación numérica podría acompañar a las empresas productoras en este camino? Este tipo de modelación utiliza algoritmos matemáticos y simulaciones computacionales para predecir el comportamiento de sistemas complejos. En el ámbito acuícola, permite simular dinámicas de corrientes, dispersión de nutrientes, acumulación de residuos orgánicos y condiciones ambientales, entre otros factores críticos.

Frente a las diversas innovaciones y normativas, la forma en que la industria acuícola evalúa sus proyectos ha ido cambiando, buscando sinergia con otros sitios y centros de la misma zona. Además, este tipo de modelo matemático permite a los productores actualizar constantemente la información del proyecto, logrando realizar pronósticos a escala diaria, semanal y mensual del ciclo productivo, e incluso a escala de vida útil de sus actividades.

Diego Becerra, jefe de proyectos de consultoría y modelación ambiental en Ecotecnos, nos explica la posibilidad de que esta técnica sea una aliada para la sostenibilidad en este sector. 

“De acuerdo a las necesidades del cliente, es el tipo de acompañamiento que le entregamos. Recientemente realizamos un estudio de modelación numérica en la zona sur del país para determinar si existían condiciones anaeróbicas. Se evaluaron condiciones físicas, químicas y biológicas del medio para identificar problemas de disponibilidad de oxígeno, complementando con un estudio bibliográfico sobre el comportamiento hidrodinámico del lugar. Todos estos puntos no solo contribuyen al cumplimiento normativa que exige la SMA, sino también a desarrollar soluciones que aborden los desafíos específicos y garantizar la sostenibilidad del rubro acuícola”

En sectores como estos, la variabilidad del medio es constante a causa de las recurrentes lluvias que provocan una disminución de la densidad de las aguas en la superficie, siendo importante evaluar los distintos escenarios antes de implementar un proyecto y durante el mismo, permitiendo anticiparse a los distintos cambios regulatorios, como los relacionadas con la calidad del agua, su correcta oxigenación y la gestión de residuos.

“Creemos que debe existir un monitoreo constante de recopilación de información, considerando como mínimo una vez al mes, con el objeto de determinar de manera macro la sinergia del centro de cultivo con las condiciones del medio marino”, concluye Becerra.

Esto brinda la oportunidad a las empresas acuícolas de mantenerse un paso adelante, contando con un socio estratégico que impulse su evolución a largo plazo y las posicione como líderes en la producción sostenible de alimentos a nivel mundial. 

El impacto de este sector trasciende industrias y regiones, representando un aporte significativo a la economía. Hasta junio de 2024, las exportaciones alcanzaron un total de US$ 4.374,6 millones, equivalentes a un volumen de 918 mil toneladas, moviendo una parte importante de la economía del país.

Para mantener el liderazgo en la producción de salmónidos, es fundamental contar con soluciones tecnológicas de vanguardia y apostar por la recopilación y el análisis constante de datos. Esto permitirá a las empresas consolidar un compromiso con el futuro, donde la acuicultura se destaque como un modelo de innovación, responsabilidad y sostenibilidad.